Educación, educación, educación, manipulación, implantación y suplantación

“Es buena la educación cuando es buena”

Colombia un país prolífero en Leyes de la República, Decretos y Sentencias más que muchos países en circunstancias similares nos llevan a afirmar que tenemos metido al estado hasta en los calzoncillos, el estado social de derecho resultó ser la única manera de proteger al prójimo, no solo de los funcionarios corruptos del estado, sino de las aves de rapiña llenos de codicia, y por qué no de los padres y madres de familia dejados, abusadores y despreocupados.

Con gran desilusión me siento atacado por el deseo de los legisladores y gobernantes de asumir cada día más y más competencias y decisiones de cada individuo y estoy pensando que mañana seguramente me dirán como debo lavarme los dientes por una Ley o un Decreto y seguro que encontraran las estadísticas para demostrar que en Colombia tenemos muy mala salud oral y bueno ellos son los salvadores de la patria y deben educarnos a las buenas o a las malas.

Tuve la oportunidad de leerme el proyecto de Ley 229 de 2021 y el trabajo de  Estefenn, Ember  (2016) citado varias veces en el proyecto analizado denominado “Para enseñar educación para la sexualidad hay que estar a la altura de los niños, formulación de competencias y habilidades para la sexualidad en niños, niñas y adolescentes de 6 a 9, 10 a 14 y 15 a 18 años”, analicé los conceptos presentados, las definiciones, el objetivo del proyecto, las motivaciones y en la práctica como es que se quiere implementar este conocimiento en los niños, niñas y adolescentes.

Es claro que, la mayoría de los padres hoy nos damos cuenta en la deficiencia de la información que recibimos como hijos y que para algunos de nosotros con esta información o nos fue bien o nos fue mal, igualmente somos conscientes que, en diferentes partes de nuestro país la información que trasmiten los padres sobre la sexualidad es de muy mala calidad o prácticamente nula y que algunos de los resultados en las estadísticas son el reflejo de un problema social, fruto de los errores de los padres.

¿Pero es suficiente una muestra estadística regional para generar una Ley de aplicación nacional? ¿no son las leyes de la estadística claras en determinar la lectura del muestreo? Me surgen dudas sobre si todos los padres de Colombia estamos fallando en la educación de nuestros hijos, incluso yo miro mi generación y no éramos tan ignorantes cuando nos desarrollamos, pero claro está que reconozco que el problema existe y que hay lugares donde la dificultad está fuera de control, pero me pregunto y ¿los padres dónde están? Serán ellos los responsables de tal ignorancia en los jóvenes o es culpa del Estado.

Al analizar detenidamente este proyecto de decreto puedo afirmar que no debería ser para los colegios públicos y privados y las escuelas de formación de docentes; este proyecto es para las escuelas de padres aprobadas en la Ley 2025 de 2020, allí se deben impartir a los padres los conocimientos generales de los objetivos del proyecto y el estudio que lo soporta, porque son los padres, los que con la intimidad del hogar, el amor, la paciencia, la individualidad de cada niño que pueden y deben formar en ellos la educación sexual integral.

Para sustentar lo anterior, procedo a presentar un pequeño análisis frente al proyecto de Ley y el estudio que los sustenta y que establece, por ejemplo: “que los niños de 5 a 8 años deben poder definir el concepto de familia y de matrimonio” ahora bien ¿cuál es el concepto de familia correcto? El de la Constitución de 1991 con su Asamblea Nacional Constituyente con más de 3.700.000 votos se determinó en el Articulo 42 donde está constituida por un hombre y una mujer o por el contrario debemos remitirnos a la definición de la Sentencia C-577 de 2011 donde 9 Magistrados tomaron una decisión y ahora familia la constituyen un hombre con hombre, mujer con mujer etc. El tema de lo que es familia, es íntimo del núcleo familiar; ahora la definición de matrimonio tiene iguales o peores problemas, recordemos que la palabra matrimonio viene de la palabra matriz pero el concepto de la Honorable Corte Constitucional es que se puede contraer entre dos hombres y así sucesivamente los conceptos básicos de la educación sexual están ligados a los padres no a la ideología del profesor de turno, ni al ministro de educación de turno, por lo que tratar de suplantar a los padres es algo ideológicamente incorrecto, en un país donde se propugna la libertad.

Revisemos otro ejemplo según el estudio soporte de este proyecto de Ley que establece: que los niños de 5 a 8 años deben definir la palabra “género” me pregunto ¿existe consenso científico sobre si existen más de dos géneros biológicos? ¡Pues no! Entonces, que van a enseñar los profesores de los colegios ¿no será que esto depende de la concepción que los padres quieran enseñar a los niños? Ahora bien, el respeto que puedan enseñar los padres a los hijos, sobre lo que está pasando actualmente con la comunidad LGTBQ, no obliga que los padres a que debamos reconstruir una información errada o falsa o diferente, que enseñe un profesor, esto debe competer a los padres y a nadie más.

Ahora analicemos, este otro ejemplo:  La idea de enseñar a los niños de 9 a 12 años que deben poder describir la respuesta femenina y masculina a la estimulación sexual / Definir los elementos claves para el placer sexual y la responsabilidad; personalmente no veo necesaria que un profesor o profesora este explicando sobre el placer sexual a mis hijos, esto es, algo que le vamos a explicar los padres responsables, poco a poco según su edad cognitiva y revisando, que los niños estén preparados, mejor dicho, esto puede generar vínculos con los profesores muy sexuales y esta cura puede ser peor que la enfermedad. Así las cosas, dejo ese proyecto para los padres y no para los niños.